Lo encontramos manifestado de diversas formas, pero la idea de que el concepto “crisis” lleva unido el de “oportunidad” se ha convertido en un mantra profesional en todo el mundo. También en el ámbito personal hemos ido aprendiendo que ante las adversidades hemos de estar dispuestos a la transformación.
Y a echar mano de herramientas que faciliten esa transformación. Y si puede ser de forma asequible, mejor. Entonces nada más asequible que echar mano de los conocidos, amigos de los amigos. Sí, estamos hablando de las redes sociales. La utilización de las redes y sus mecanismos en el ámbito profesional ha venido a llamarse networking social.
El networking viene de lejos, concretamente de 1930 cuando al escritor búlgaro Frigyes Karinthy expuso al mundo su Teoría de los Seis Grados de Separación por la que una persona puede estar conectada a otra –en cualquier lugar del planeta- a través de una cadena de tan sólo cinco intermediarios. Algo así como los amigos de mis amigos son mis amigos.
Traducido al mundo online, se convierte en una gran y valiosa base de datos de contactos útiles para nuestra vida profesional, para los negocios. Sin ser la receta mágica, es evidente que poseer contactos interesantes allana el camino de nuestros proyectos.
La desventaja principal sería la distancia y, consecuencia la desconfianza, a la hora de cerrar acuerdos y trabajar junto a personas que no conocemos en vivo y en directo. Sin lugar a duda, lo ideal es combinar lo mejor de ambos mundos: real y virtual. Las reuniones, congresos, encuentros, etc… siguen siendo importantísimos.
Conocer y darse a conocer telemáticamente a otras personas con las que colaborar y trabajar es un primer paso importantísimo cuyo final previsible y deseable es estrechar la mano del otro. Pero en tiempos como los que corren, cuando estamos viviendo en confinamiento y teletrabajando por culpa de la pandemia mundial de COVID19, está claro que el networking se convierte en la alternativa obligada al trabajo presencial. Ya fue una tendencia el alza en la última crisis económica mundial. Hoy por hoy, se está convirtiendo en una situación cotidiana y normal.
Poner en contacto el talento, las oportunidades, los proyectos… Lo cierto es que quienes hace tiempo que han comprendido esta realidad en toda su extensión son las mujeres. En otro momento, si os parece, abordaremos el tema de la mujer en el mundo laboral, pero desde el Equipo de Close os podemos asegurar que existe una forma característica de hacer networking en femenino y que pertenecer a una comunidad de mujeres es una oportunidad para el empoderamiento. Lo compartiremos.